Un pato con sexto sentido.
En los jardines de un parque de Friburgo (Alemania) se alza un pato inmortalizado en piedra con el pico apuntando hacia arriba, evocando la memoria de un hecho que parecería legendario si no fuera porque está escrito en la crónica de la historia reciente. El suceso, referenciado por el doctor Hans Bender, director del Instituto de Parapsicología de la Universidad de Friburgo, comenzó la noche del 27 de noviembre de 1944, cuando una amenazadora nube de bombarderos se cernía sobe esta ciudad.
Momentos antes, un pato comenzó a graznar de forma realmente angustiosa. Sus escandalosos graznidos sirvieron para despertar a los vecinos de las casas colindantes , quienes de este modo tuvieron tiempo suficiente para ponerse a salvo en sus refugios cuando, minutos después, ya podía oírse en los cielos la amenaza de los aviones militares de las fuerzas aliadas antes de que se iniciase el bombardeo sobre la población.
Antonio Luis Moyano, "Más Allá de la Ciencia nº 158"